CULTURAS HIBRIDAS

Posted on 20:28 by aula subversiva

La infrastructura de ARCIS Santiago no siempre fue lo que conocemos ahora como Universidad, las paredes que mantienen esta Universidad guardan una Historia bastante amplia y para todos los gustos. A finales del siglo XIX, ARCIS era conocido como “Fundicion Libertad”, una de las fundiciones mas importantes durante fines del mencionado siglo y mediados del siglo XX. En ese entonces, según un contemporáneo de aquella época, Mariano Martinez (1896), nos cuenta que en ese entonces era una de las fundiciones mas prosperas , sin duda, no se equivoco, ya que llego a tener a mas de 1000 trabajadores. A principios de los años cuarenta gracias las guerras que estallaron por aquellos años (la del pacifico y las 1ª y 2ª Guerra Mundial). En este lugar se fabricaban importantes elementos

como ejes para ferrocarriles, frenos, llaves de paso, grifos y tapas de cámara. Sus instalaciones incluían una fundición de fierro, otra de bronce, y talleres de calderería, mecánica y moldeado, prestando servicios especiales de fabricación a la agricultura, industrias, minas, empresas de agua potable, etc.

Durante la Unidad Popular, la fundición fue comprada por el Estado, según trabajadores de la época, se incluyeron mejoras salariales, alimenticias, ambientales, psicológica y de asistencia social. Luego del golpe militar, fue vendida a privados y rematada en los ochenta, estando abandonada durante una década hasta que ARCIS decidió radicarse en ella para devolver esta vez, el importante sitial que había ocupado en la Historia de Chile, pero esta vez no desde la “Industria mercantil”, sino que desde la “Educacion”. Es asi como podemos ver en los patios de la Universidad como distintos grupos sociales, étnicos, religiosos, artísticos, etc., convergen por un fin común… la Educacion. Se cambiaron las herramientas de los trabajadores por los libros y los cuadernos, las calderas; por aulas de clases y oficinas administrativas, las maquinas; por ordenadores, escritorios, mesas y sillas... Al parecer las palabras del Sr. Küpfer al Sr. Martinez (1896) refiriéndose a las aptitudes de los operarios chilenos para el trabajo, no fueron erradas si vemos que lo que fue la antigua fundición, ahora es una institución educativa: “tienen, dijo, mucha facilidad para aprender”… pero el lugar sigue siendo el mismo, esta vez restaurado y modificado físicamente. Es interesante ver como en las paredes se encuentran el presente y el pasado, ambos prestando servicios para los futuros profesionales, pero estas paredes no solo sirven como protección contra las inclemencias del clima, se han convertido también en lugar de muestra de distintas pinturas, afiches y mensajes ocultos, como protectores en tiempos de protestas, como lugares de aquellos gritos silenciosos que encontramos en los baños, etc. ARCIS es actualmente un lugar cargado de Historia e historietas que abundan en los pasillos, de lios amorosos, de encuentros y desencuentros, de ilusiones, esperanzas y sueños…